SJReaverwolf

Sumergido en la penumbra de la media noche, un hombre se desdibuja al adentrarse a la sombra que habita calles apagadas bañadas en lluvia, lluvia que lo rodea, lo cubre, lo vuelve uno con la ciudad, uno con los árboles, con las personas, con los edificios, uno con la nada que se apodera de todo aquello que se doblega. El cuello del abrigo levantado y las manos en los bolsillos, sus pies fundiéndose con el húmedo pavimento que roza sus pies, suelas desgastadas cediendo al frío que yace debajo, frío que se adentra, que adormece, que seduce con gélidas caricias adornadas por precipitadas gotas, punzantes roces

Pasados unos minutos en los que tanto la enfermera y yo recuperamos el aliento, le pido me traiga mi ropa para poder retirarme, tras un poco de insistencia al respecto, finalmente accede con una leve sonrisa cuando le digo que de ser necesario saldré de este hospital en bata y con mí entumecido trasero al aire. -No deberías irte aún, estuviste inconsciente por una semana, necesitas que un doctor te examine- me dice mientras pone mi ropa en la cama. -¿Una semana?- le respondo mientras comienzo a abotonarme la camisa, -se sintió como si hubiera sido más de un año si me lo preguntas- Tras

Una extraña molestia habita en mi cabeza, igual que el zumbido de un insecto en medio de la noche arruinando mis pocas horas de sueño, mi cuerpo se siente débil y al mismo tiempo pesado, el cansancio me domina como si se hubiera postrado sobre mi cuerpo impidiéndome moverme, forzándome a dormir de nuevo, pero cada vez, esa molestia volvía, ese zumbido... ¿Qué era ese sonido?, ¿En dónde estoy?...no importa, estoy, me siento tan cansado... Pero ese sonido no se va, sigue retumbando en mi cabeza impidiéndome que me pierda en mi mismo de nuevo, ese molesto zumbido, se vuelve algo mas, se vuelve, una idea, una molesta idea... Todo está oscuro,

Observando la escena Que me regala tu espalda Contemplo un paisaje infinito Contemplo un destello de tu alma Me encuentro a tu pelo Y a sus negros caireles Que serpenteantes se ciernen Con danzantes vaivenes Sobre tu piel dulce canela Y sobre tus hombros posando Con caricias de acuarela Donde mis ojos van pintando Y me sorprende de repente El espejismo de tu risa Cual luz de luna sobre nubes Como humedad entre la brisa Con tú mirada acompañada Tan discreta y temerosa De desbordar tu alma entera Como el oleaje en la marea Como la espuma entra en la costa Y seguiré pintando valles Dibujando entre tus sombras Hasta el día que me acompañes

Te miro, siempre presente Te observo, siempre distante Siempre a mí vista más siempre intocable Como la luna, cómo una estrella Resplandeces en mis noches Levantas mi marea Agitas mi oleaje Iluminas mis lluvias Siempre presente, Siempre distante Te ocultas entre tus nubes Danzando en las tempestades Con tu baile hipnotizas mi mente Jugueteando con tus eclipses Penando con tus menguantes Tú eres mi luna, mi luna errante Me llamas en mis sueños con tu brillo Me llamas a despertar para buscarte Y te busco por siempre hasta desfallecerme Para poder dormir cansado Para poder siempre soñarte

Salvaje, Indomable Como el oleaje a medianoche bajo la luna Tan peligrosa como el mar furioso que no perdona a alma alguna Mirarte, escucharte, desearte, soñarte más nunca tocarte. Perseguirte, cazarte, resignarme hasta que el corazón me reviente Correr tras de ti hasta que mi aliento se agote,hasta que mi voluntad explote Seguirte o perderte, sin acuerdos ni opciones Sin promesas, ni esperanzas, sin mañanas ni ilusiones Seguirte o perderte, mas nunca tenerte. Con belleza implacable, con mirada ardiente Con el corazón escondido para que no te lo tiente Nos enfrentamos en el frío pero mi alma siempre hierve Nos enfrentamos en el frío pero mi

Un fantasma enamorado De una mujer que ya no existe Un espectro encadenado Un espíritu atrapado. Por unos besos inventados Por un amor mal fabricado Por una silueta hecha de sueños Por una silueta encadenado. Llorando lágrimas de humo Soltando gritos que se ahogan Un fantasma enamorado De una falacia vuelta gloria. De un ideal nacido en recuerdos De una meta que yace en derrota Yo soy todo el amor que no me diste Y tú este corazón que no aceptaste. Soy un fantasma que solo vez tú Tú parada frente a aquí y ahora Tú que me conociste Tú que me enamoraste. Tú que te