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Después de un arduo trabajo de investigación, y de sacrificar varios nokis para poder realizar el estudio, comparto con ustedes algunos esquemas que dibujé basándome en lo que descubrí dentro de ellos.
En el primer gráfico se ve el noki en su estado normal. Se pueden apreciar las proporciones básicas (aunque en los estudios variaban levemente de un noki a otro), el color, así como sus cuatro extremidades, sus ojos y su ombligo en forma de "x". El noki carece de cualquier cavidad fuera de sus ojos, ya que su sistema trabaja de forma muy diferente a la humana (su cuerpo absorbe todo y conforme pasa el tiemo va despidiendo un olor dulce y azul que sirve para irse desprendiendo de aquello absorbido).
En el segundo esquema se presenta el esqueleto del noki. El cráneo, las costillas que protegen dentro el elemento más importante del noki, un hueso corto para cada extremidad y un hueso pélvico que da equilibrio a su cuerpo. Es importante notar que se descubrió que los antepasados de los noki tenían una cola, por lo que el hueso pélvico aún mantiene restos de la misma.
En el tercer dibujo se aprecian sus órganos. El noki solo cuenta con 4 órganos, el cerebro, el hígado, el estómago y el órgano más importante: el corazón. El cerebro la mayoría del tiempo se mantiene en un estado inactivo ya que el noki trabaja básicamente con los otros tres órganos. En algunos experimentos se removió el cerebro y el noki seguía funcionando casi correctamente. Su cerebro solo se activaba al enfrentarse a problemas lógicos (saben mucho de matemáticas y física cuántica)
Posteriormente se seguirán haciendo averiguaciones respecto al funcionamiento del noki, pero por ahora se acabó la dotación de sandias. Esperamos recibir pronto un cargamento con 200 sandías, y con algo de suerte encontraremos al menos 30 nokis para seguir aprendiendo más de ellos.
Hasta la próxima.