Prólogo
Siglos atrás, antes de las Chaos Esmeraldas, había tribus que saciaban su poder de control sacrificando a inocentes con las peores torturas, dejándose llevar por el momento. Cada mes sacrificaban a más y más, hasta el punto que las hembras que estaban embarazadas huían con temor de ser escogidas y que les abrieran el estomago para sacar a la cría no nacida. Una pequeña familia había logrado huir del lugar sin ser descubiertos, pero sabían que no podían confiarse, todas las noches corrían sin ver atrás para poder alejarse de ese holocausto. Un pequeño erizo rojo